Buenos tardes a todos.
En primer lugar quiero explicar someramente por qué nació este libro, su razón de ser…
A partir de cierta edad siempre me ha gustado retratar o cronicar actos o acontecimientos que tenía en mi ambiente cercano, ya que no tengo las cualidades pictóricas de los artistas que han embellecido mi libro (Luis Juan Torres López, Paco Bordés, Pedro Mora Figueroa, Pepe Expósito, etc.), para dejar constancia escrita y fotográfica de los aconteceres más sobresalientes, en mi particular opinión, con el fin de que la memoria no los orillara para siempre en un futuro más o menos lejano.


Todos los artículos de este libro, a excepción del prólogo, la introducción y el epílogo, se han ido publicando a lo largo de dilatados años en diversos periódicos o revistas como Gavellar, IBIUT, las webs (antigua y nueva) de la Asociación de Antiguos Alumnos de Magisterio de la Safa de Úbeda (AAMSU) y Amigos Safa, revista AMALGAMA y DIARIO JAÉN, principalmente, por ello podíamos decir que ha ido formándose lentamente, cual tela de araña, sin que yo mismo supiese que se iba a constituir. Ha sido una elaboración cuasi invisible, que muestra, a las claras, lo que siente, piensa o vive intensamente un antiguo alumno externo egresado de esta gran tahona educativa que es la SAFA ubetense, cuyos recuerdos, vivencias y añoranzas van haciéndosele más nítidos y dulces conformen pasan los años.
En un principio pensé hacerlo de una manera deslavazada, huyendo de una cronología exhaustiva de la fecha de su escritura y/o publicación y sin agruparlos en temas, pero mi amable y sagaz prologuista me aconsejó que era mejor ordenar los 80 artículos que contiene este libro, por diferentes materias, para que tuviese más amenidad y seguridad el amable lector, unidos todos ellos por un denominador común: sus protagonistas son todos profesores, maestros o antiguos alumnos safistas ubetenses.

En segundo lugar, quiero desgranar el libro lo más sencilla y didácticamente posible. No se asusten ustedes. Seré breve.
Tiene 356 páginas, 417 fotografías (todas ellas referidas a la crónica u opinión que le acompaña), varias plumillas de los artistas Paco Bordés y Pedro Mora, un dibujo a color de mi persona que me regaló el artista ubetense José Rodríguez Expósito cuando convivíamos en el Consejo Escolar del IES Francisco de los Cobos de Úbeda; y un retrato de cómo me vio mi alumna Miriam Martínez Muñoz (de 2ºA).


Aparte del prólogo, la introducción y el epílogo, MI UNIVERSO SAFA está dividido en seis apartados: El primero se refiere a nuestra querida Promoción de Magisterio 1970-73, en donde reflejo, en catorce artículos, los dos fraternales encuentros que tuvimos con motivo de nuestro 25 y 40 aniversario, respectivamente, así como diversos acontecimientos curiosos, recordables o importantes que ocurrieron en nuestro tiempo de estudio; resumiendo, en fin, nuestra estancia en la Safa de Úbeda visto por un alumno externo.


En el segundo apartado del libro he querido reflejar algunas reuniones destacadas de la AAMSU (Asociación de AA. AA. Magisterio de la Safa de Úbeda) para demostrar que -contra viento y marea- esta asociación estuvo siempre bien comandada durante muchos años por José María Berzosa Sánchez, hasta que tuvo la suerte de coger su relevo José Luis Rodríguez Sánchez. Marchando nuevamente sobre ruedas.
En el tercer apartado, de los diez encuentros que llevamos la Asociación de los Antiguos Alumnos de la Safa (dos de ellos virtuales) he reflejado algunos, cronicando mis personales impresiones sobre estas reuniones tan gratas que nos han montado Paco Bordés y su cohorte de incondicionales y que hace que todos los años, el primer fin de semana de junio, sea una fecha feliz a tener muy en cuenta en el calendario de los safistas que aman y recuerdan fervorosamente su casa madre en Úbeda, mientras fueron formándose para conseguir ser hombres y mujeres de provecho…

No podía faltar, en el cuarto apartado, un reducido obituario safista, que siempre resonará como ocho aldabonazos en nuestra conciencia individual y colectiva, para que los tengamos siempre presentes.

En el quinto apartado he querido reflejar la valía y el buen ejemplo de D. José Latorre Salmerón, el Padre Mendoza (D. Jesús Mendoza Negrillo), D. Lisardo Torres Torres, D. Luis Juan Torres López (como gran artista y buena persona) y D. José María Berzosa Sánchez, como vivos e imperecederos modelos en sus destacados valores personales y docentes que tuvimos la gran suerte de tener en el crucial y preciso momento de nuestro aprendizaje del oficio de maestro (me refiero especialmente a los tres primeros).

Y en el sexto y último apartado, he hecho un auténtico cajón de sastre mediante una miscelánea en la que hay hasta cuarenta artículos, tantos como en las otras cinco secciones, en los que he reflejado exposiciones, conferencias, jubilaciones, recorrido profesional, presentaciones de libros… hermanando a safistas de diferentes promociones y generaciones como Jesús Maeso de la Torre, Jesús Mª Burgos Giraldo, Mari Carmen Ruiz Ara, Antonio Muñoz Molina, Margarita Latorre García, José López Ruiz, Ramón Molina Navarrete, Eduardo Jiménez Torres, José Mª Latorre García, Miguel Pasquau Liaño, Pedro Mora Figueroa, Miguel Luis Carrasco Ramo, Jesús López Román, JASA (Juan Antonio Soria Arias), Diego Rodríguez Vargas, Pedro Martínez García, José Luis Rodríguez Sánchez y Antonio Lara Pozuelo. Algunos de ellos haciendo doblete y hasta triplete.
He incluido aquí otros artículos sobre jubilaciones, mi primer destino, mi vida de maestro, vuelvo a ser alumno de la SAFA de Úbeda, gracias a mis maestras de inglés, para terminar contándole a mi nieto Abel lo de la Safa de Úbeda que tanto le interesa…


Los seis apartados forman un sólido documento safista que permanecerá como fiel y alegre compañero de viaje, en este túnel tiempo por el que todos los humanos vamos pasando y aprendiendo…

Ahora toca los agradecimientos…
En primer lugar dar las gracias a la SAFA (¡Muchas gracias, Safa de Úbeda, por haberme (habernos) dado tanto…!) y a sus dignos representantes personados aquí, que nos han facilitado esta magnífica Aula Magna que tanto me recuerda mis estudios de maestro, pues en este mismo lugar estaban las clases en 1º de magisterio. Agradecerles, también, muy sinceramente, a todos los presentes que habéis estado aquí para arroparme en la presentación de mi primer libro sobre la SAFA que me he atrevido a publicar, aprovechando el cincuentenario de nuestra Promoción de Magisterio 1970-73.


¡Qué mejor ocasión que esta para dejar impresos 80 de mis artículos que giran alrededor del universo SAFA que se me fue consolidando desde que entré por primera vez a estudiar magisterio con 16 años, un tanto perdido, sin saber cuál podría ser mi futuro profesional… ¡
No puedo olvidar darle las gracias a mi buen amigo Pedro Mora Figueroa que ha sido persona y pieza imprescindible para que hoy vea la luz MI UNIVERSO SAFA. Maestros de la Safa de Úbeda. 1973, por la bondadosa y magnífica presentación que ha hecho de mí, además de sus múltiples ayudas y consejos recibidos como persona más avezada que yo en muchas cosas y especialmente en las lides de la maquetación y publicación de libros. Muchas gracias por todo Pedro. También quiero agradecer a Miguel Ángel Barbero Barrios que con su paciencia, bonhomía y amabilidad haya sido posible que DIDACBOOK edite un nuevo libro de un antiguo alumno de la SAFA de Úbeda.
Agradezco, así mismo, a toda mi familia nuclear (mis dos Margaritas y Mónica, así como a Emilio) -de la que me siento tan orgulloso- la ayuda que siempre he recibido en todos los campos de la vida y, especialmente, en lo referente al universo mágico de la SAFA de Úbeda, pues me han animado a ir desempolvando y elaborando recuerdos, vivencias, crónicas y relatos de este emocionante y trepidante mundo safista al incitarme a publicarlos con alegría y orgullo.
También estoy sumamente agradecido a Luis Juan Torres López, por su artística y original cubierta, en cuya portada ha sabido captar muy bien el título del libro (MI UNIVERSO SAFA) con la fachada más representativa de la Safa de Úbeda envuelta en la oscuridad del universo en el que vivimos nuestro planeta Tierra cuando no es iluminada por el sol; también agradezco a Paco Bordés y Pedro Mora por sus magníficas plumillas sobre edificios ubetenses reseñables, contribuyendo -los tres- a que este libro sea más apetecible y atractivo a cualquier lector (y si es safista mucho más). Tener buenos y sólidos amigos hace la vida más fácil, dulce y feliz…
Y para terminar el acto, quiero leer el artículo BIOGRAFÍA DE UN DOCENTE EJEMPLAR (página 174 de mi libro), como homenaje y recuerdo emocionado a uno de los mejores maestros de la SAFA de Úbeda, que en vida nunca quiso dárselas de nada, pero que se hinchó de impartir clases particulares durante muchos años y veranos para sacar adelante a su familia, siendo conocido y admirado por muchas generaciones de ubetenses que recordarán la cochera donde impartía sus clases como la antesala de su cielo infantil-estudiantil; y siempre con una fortaleza y constancia encomiables…
Úbeda, 2 de junio de 2023.
Fernando Sánchez Resa

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